Virgilio Saquicela defiende su designación como presidente de la Asamblea tras la destitución de Guadalupe Llori. Este miércoles tomó posesión y aclaró que se respetó el proceso legal, por lo que no cabe ningún tipo de acción o impugnación. “Democráticamente y de forma legítima se destituyó a Llori…no se trata de nombres, ni de hombres, hay que buscar consensos por el bien del país”.
Pese a esta apertura, el Gobierno ha rechazado su designación pues no se respetaron las medidas cautelares vigentes. El bloque oficialista adelantó que no reconoce a Saquicela como presidente de la Asamblea, así lo anunció Nathalie Arias.
Pero más allá de las medidas cautelares, los oficialistas y Pachakutik reclaman que se irrespetó el proceso legislativo, ya que la destitución se dio a través de una moción previa, en un pleno que ya contaba con el orden del día aprobado, es decir no cabían más cambios.
En su primera rueda de prensa, Saquicela aprovechó para aclarar que, tras su designación como presidente de la Asamblea, no hay ningún pacto con el PSC o UNES. “Mi único pacto es con el pueblo”, sostuvo.
Pese a los cuestionamientos, Saquicela empezó a tomar decisiones como presidente. La primera de ellas fue convocar al pleno este viernes 3 de junio para debatir sobre la ley del uso legítimo de la fuerza. Además, aclaró que la Asamblea seguirá su curso, afirmó que los juicios políticos no cambiarán de orden.
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