El constitucionalista Ismael Quintana, considera que actualmente no hay caminos legales para terminar con el mandato del presidente Guillermo Lasso y lo que se está viviendo en este momento con el paro nacional, demuestra que hay una clara intención de golpe de Estado, figura que no contempla la Constitución.
El experto explicó que los caminos que plantea la ley para avanzar con un fin del mandato son: muerte cruzada, juicio político al presidente y revocatoria del mandato. Los tres procesos son difíciles y por ahora, a su criterio, no son viables. “Hay muchos intereses políticos de tras, es evidente que el correísmo quiere terminar de manera anticipada con el Gobierno de Lasso”.
De darse el golpe de Estado o la rebelión, quien debería asumir la presidencia sería Alfredo Borrero pero si hay una ausencia simultánea, le corresponde al presidente de la Asamblea, Virgilio Saquicela, quien ocupará el cargo de manera temporal hasta que se llamen a nuevas elecciones.
Además, advierte que, de derogarse el estado de excepción en la Asamblea Nacional, lo mejor para el país dice sería aplicar la muerte cruzada y al menos gobernar por un tiempo paz. “Hay que ver si en Carondelet tienen los pantalones para hacerlo” finalizó Quintana.
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